4. LEGUMBRE SECA O COCIDAS DE BOTE
Como todo, siempre es mejor procesar los alimentos en nuestras cocinas . Si compras las legumbres secas, podrás prepararlas de forma que sean más digestivas (con un buen remojo y un poco de hinojo en la cocción). Pero, en mi opinión, también vale la pena tener algunos botes de legumbre cocida para sacar cuando se ha hecho la hora de comer y no tienes nada , o para preparar un hummus de emergencia.
5. HARINAS SIN GLUTEN
Para las tortitas o pancakes de la mañana, o para hacer un bizcocho casero los días más festivos. Mis favoritas son la de garbanzos y la de trigo sarraceno para rellenos salados y la de avena para rellenos dulces.
6. ACEITE DE OLIVA VIRGEN
Para todo. Tenemos tanta suerte de vivir en uno de los países grandes productores de este oro verde , que no puede ser más sano y nutritivo y que le da un sabor espectacular a todo. Eso sí, siempre tiene que ser virgen .
7. ACEITE DE COCO VIRGEN
Yo lo uso para saltear frutas o verduras, porque les deja un aroma exquisito. También es sanísimo si es virgen .
8. ACEITUNAS
A mí me encantan y, además, me salvan cuando tengo hambre y todavía no es la hora de sentarse a la mesa. Junto con el hummus, me resuelven el aperitivo cuando tengo visitas inesperadas. Lo que siempre vigilo es que sean naturales y no lleven glutamato monosódico (E621), un aditivo potencialmente neurotóxico.
9. FRUTOS SECOS Y SEMILLAS
También, para picar cuando tienes hambre, para ponerle onda a las ensaladas, para hacer un pesto, para un bowl matutino. Son fácilmente transportables y por ser ricos en grasas sanas y proteína , dan mucha saciedad. Imprescindibles en las dietas vegetarianas.
10. ESPECIAS Y HIERBAS TIPO CANELA, CÚRCUMA, ORÉGANO...
Hay que aprender a usarlas, pero vale mucho la pena la inversión. Las especias son un gran regalo de la naturaleza porque, además de ser muy ricas, son altamente terapéuticas. Mi favorita es la canela , que no falta en casi ninguna receta dulce y que, además, ayuda a gestionar el azúcar que ingerimos.
Y MUY IMPORTANTE: LIMPIA TU DESPENSA DE PRODUCTOS INSANOS
Como siempre te digo, antes de ponerte a llenar la despensa, asegúrate primero de quitar todo lo que boicotea tu intención de llevar una alimentación sana. Ten siempre a mano aquello que no te reprocharás de tomar y aparta de tu vista todo lo que terminará minando tu voluntad . Verás qué gran favor te haces.