El consumo indiscriminado que hemos hecho de este veneno blanco nos ha traído una buena parte de los problemas metabólicos que hoy padecen jóvenes y adultos. Las estadísticas que tenemos en nuestro país de sobrepeso y obesidad infantil no son para nada alentadoras y, sin ninguna duda, algo tendremos que hacer al respecto.
A los niños les encanta el sabor dulce y esto no tiene nada de malo, si sabemos escoger los alimentos que les ofrecemos. Cuando les damos alimentos procesados y ricos en azúcar, se genera una respuesta metabólica que no es para nada interesante a corto, mediano o largo plazo.
A los niños les encanta el sabor dulce y esto no tiene nada de malo, si sabemos escoger los alimentos que les ofrecemos.
Además de alterar sus sistemas nerviosos y generarles ansiedad por consumir más azúcar , los niños se acostumbran a sabores demasiado estimulantes y ya no pueden apreciar el gusto dulce natural de los alimentos. Esto, además de otros inconvenientes graves como las caries, sobrepeso, hígado graso, problemas cardiovasculares, vinculados al consumo excesivo de azúcar .
¿Cuáles son los mejores endulzantes para las comidas de los niños?
Cuando queremos endulzar algún alimento o receta, podemos buscar alternativas más naturales y saludables al azúcar blanco. En general, conviene optar por endulzantes que van acompañados de otras sustancias como antioxidantes, fibra, vitaminas, minerales.
En general, conviene optar por endulzantes que van acompañados de otras sustancias como antioxidantes, fibra, vitaminas, minerales.
El azúcar blanco está vacío de cualquier nutriente y, peor aún, es un producto que desnutre . En cambio, los alimentos que siempre serán una buena opción cuando queremos endulzar nuestros platos son la fruta fresca, el coco rallado, las frutas secas (dátiles, pasas de uva, orejones, ciruelas, higos), la algarroba y algunas especias como la canela, la vainilla o el regaliz. Además de ser alimentos de verdad, es decir, que los consumimos tal cual los ofrece la naturaleza, aportan un dulzor más suave que permite disfrutar del sabor de la comida. Y, por supuesto, son mucho más nutritivos.
También está todo el grupo de los endulzantes naturales, como la miel cruda, el azúcar de panela, el azúcar de coco, el jarabe de arce o el sirope de agave crudo . Todos estos endulzantes aportan azúcares de rápida acción y por tanto deben tomarse de forma moderada.