Debido a sus múltiples propiedades, podemos decir que el jengibre es como un pequeño botiquín. Pero lo mejor de todo es que es natural, delicioso, fácil de tener en casa y también de llevar siempre encima.
Te contamos para qué sirve el jengibre, todos sus beneficios y las diferentes formas de tomarlo para que empieces a incorporar en tu vida esta súper raíz.
Propiedades y beneficios
El jengibre es una planta medicinal originaria del este asiático, de la que usamos su raíz como alimento y medicina. Es una muy buena fuente de vitaminas A, C, B1, B2 y B6 y también es rico en minerales como el calcio, potasio, hierro, manganeso y fósforo.
Además, contiene aceites esenciales, siendo el más destacado el gingerol, que le atribuyen un potente aroma y un sabor un tanto peculiar, pues es dulce, picante y refrescante a la vez.
La vitamina B6 estimula los receptores de serotonina, conocida como "la hormona de la felicidad". De este modo, al tomar jengibre, potenciamos el buen humor y alejamos la depresión.
Mejora la defensas: Ayuda a combatir los radicales libres causantes de la degradación de los tejidos y del envejecimiento, a la vez que estimula el sistema inmunológico, mejorando nuestras defensas.
Alivia resfriados y fiebre: Sus propiedades diaforéticas ayudan a aumentar la temperatura corporal a la vez que promueven la transpiración, resultando perfecto para tratar estados febriles y gripes. Además, limpia y desinfecta el organismo de posibles gérmenes y elimina toxinas, por lo que está especialmente indicado en resfriados y congestión nasal.
Potencia el buen humor y ayuda a combatir a el estrés: La vitamina B6 estimula los receptores de serotonina, conocida como "la hormona de la felicidad". De este modo, al tomar jengibre, potenciamos el buen humor y alejamos la depresión. Por otro lado, la vitamina B6 ayuda a calmar el sistema nervioso y a disminuir la ansiedad en épocas de estrés.
Calma los dolores de las articulaciones: El Gingerol alivia los dolores musculares de las articulaciones, por lo que es muy recomendable para tratar los síntomas de la artritis, el reuma y la osteoporosis.
Reduce las náuseas: El jengibre tiene la propiedad de reducir la sensación de náuseas, vómitos, mareos y vértigo, lo que lo convierte en un perfecto compañero de viaje. Además, también es un excelente remedio para tratar las náuseas típicas de los embarazos.
Favorece la digestión y reduce los gases: Estimula el páncreas produciendo más enzimas digestivas, ayudándonos a mejorar la digestión y aumentando la absorción y asimilación de los nutrientes de otros alimentos. Por otro lado, el jengibre es un gran carminativo, es decir, favorece la eliminación del exceso de flatulencias en el sistema digestivo, aliviando el tracto intestinal.
El gingerol, aceite esencial del jenbibre, le atribuye su característico sabor dulce y picante.