¡Fíjate en las etiquetas!
Cuando compramos productos alimentarios es fundamental detenerse un momento a leer la información para conocer bien qué estamos comprando. En el recuadro de los ingredientes no deberíamos encontrar nada que no queramos poner en nuestra mesa (aditivos o nombres raros).
En el caso de la pasta, es muy importante verificar que entre los ingredientes no nos encontremos con la palabra "fibra" , pues eso quiere decir que, lejos de ser una pasta integral, nuestro alimento es un producto proveniente de un grano refinado al que se le ha añadido la fibra; y esto es muy diferente desde el punto de vista nutricional.
Si entre los ingredientes de la pasta figura la palabra "fibra", quiere decir que se trata de un alimento refinado al que se le ha añadido fibra, y por lo tanto no es un producto integral.
Si los ingredientes son de producción ecológica , seguro habrá más nutrición y menos toxinas . Además, se tratará de una producción más sostenible.
Pasta de legumbres con vegetales ¡un plato 100% saludable!
Elegida nuestra pasta, la manera más sana y deliciosa de completar el plato será siempre con verduras . Aunque a muchos niños les cuesta tomarlas, no deberíamos dejar de insistir, pues no existe ningún alimento que pueda reemplazar a los vegetales en sus beneficios para la salud, por lo que es muy importante que estén presentes cada día, y a ser posible en cada comida.
Además de elegir pasta de calidad, la mejor manera de ofrecer un plato saludable y completo a los niños es combinarlo con verduras.
Con las verduras les estamos aportando la máxima micronutrición (vitaminas y minerales), la mejor fibra y grandes cantidades de sustancias antioxidantes.
Receta sencilla y nutritiva: Pasta de lentejas rojas con brócoli
Una receta que siempre triunfa en casa es la pasta de lentejas rojas (me encantan las lentejas rojas porque son de las legumbres más fáciles de digerir ) con brócoli, ajo y semillas de sésamo negro.
1. Por un lado, cocinar la pasta y reservarla y, por el otro, hacer al vapor unos minutitos el brócoli (no mucho rato para que no pierda propiedades y siempre con su tallo que es donde están la mayoría de los nutrientes).
2. En una sartén con un buen chorro de aceite de oliva virgen, saltear un poquito de ajo picado y tirar la pasta y el brócoli durante un minuto para que se integren los sabores. En esta época del año, reemplazo el brócoli por espárragos y también les encanta.
3. Espolvoreamos las semillas de sésamo y voilà: lista una comida rica, fácil y muy nutritiva.