1. Cocina la pasta durante 4 minutos en agua caliente con sal. Reserva.
2. Sofríe ajo, cebolla, sal y champiñones unos 4 minutos. Añade la salsa de tomate, el caldo, la calabaza, las especias y espinacas y deja unos 5 minutos más que se integre.
3. Incorpora la pasta cocida y el queso. Mezcla muy bien. Añade las nueces y la salvia picadas y algo más de queso. Hornea hasta que se gratine... ¡y disfruta!