(Para 6 helados)
1. Un par de horas antes de ponernos manos a la obra, dejaremos los anacardos en remojo.
2. Escurrimos el agua y los ponemos en el procesador de alimentos junto con las fresas congeladas, la bebida de avena y los dátiles.
3. Trituramos hasta conseguir que no haya grumos. Reservamos.
4. Hacemos dos partes: a una de ellas le añadimos un puñado de arándanos frescos, y a la otra, nibs de cacao.
5. Echamos nuestro helado en moldes (yo he usado el pack de 6 de Ikea) y los metemos en el congelador hasta que solidifiquen.
6. Los sacamos del congelador, los desmoldamos y ya podemos disfrutar de unos deliciosos polos de fresa sanos, deliciosos y nutritivos.