Nos han intentado vender montones de productos en nombre de la pérdida de peso. Hemos pasado años convencidos de que los alimentos ricos en grasas sin distinción- engordan y son perjudiciales para la salud cardiovascular . Hemos pasado años prefiriendo productos 0% a alimentos reales. Y hoy estamos pagando las consecuencias con estadísticas bastante desalentadoras en términos de salud y, concretamente, en cuestiones de sobrepeso y obesidad.
Durante años, nos han vendido que todos los alimentos ricos en grasas engordan y son dañinos para nuestro sistema cardiovascular.
Naturalmente, no todas las grasas se comportan de igual manera dentro de nuestro organismo . Existen grasas muy dañinas que, además de no favorecer la pérdida de peso, generan un estado inflamatorio, son muy oxidativas y su consumo conduce a enfermedades y riesgo cardiovascular. Se trata principalmente de grasas o aceites vegetales refinados, presentes en una gran cantidad de productos ultraprocesados .
Existen otras grasas que , muy por el contrario, son fuente de una gran cantidad de beneficios pues, además de agradables al paladar:
resultan altamente saciantes
regulan nuestras hormonas
favorecen la absorción de algunas vitaminas
en algunos casos concretos, son muy antiinflamatorias
y además, suelen ser grandes aliadas para combatir el estreñimiento
No todas las grasas se comportan igual. Existen grasas saturadas que aportan una gran cantidad de beneficios a nuestro organismo.
Propiedades, todas estas, interesantes para quien concretamente busca quitarse algunos kilos de encima. En este grupo de alimentos se encuentra el aceite de oliva virgen y otros aceites vegetales sin refinar, las grasas del aguacate , aceitunas , semillas y frutos secos , del pescado azul pequeño (sardinas, boquerones, anchoas, caballa), de la yema del huevo
¡y del aceite de coco virgen!